Figura 3. Evaluación de la posición del injerto en el corte axial según la descripción de Kany et al.(14). Se traza una circunferencia sobre el reborde glenoideo y siguiendo la curvatura de este, y se mide en milímetros la cantidad de injerto que sobrepasa o no alcanza esta línea. En la imagen A se observa un injerto perfectamente posicionado, siguiendo la curvatura de la concavidad de la glena. En la imagen B se observa el injerto medial respecto a la línea. En la imagen C se muestra un injerto excesivamente lateralizado.