Figura 5. Imágenes artroscópicas de lesiones osteocondrales. A: localización en la zona 6 antes del tratamiento; B: después del desbridamiento del cartílago dañado hasta el borde estable y el curetaje del hueso subcondral necrótico; C: tras la microfractura y la liberación del torniquete de isquemia, que permite apreciar el sangrado conseguido con la estimulación de la lesión.